Sistema educativo

¡Buenas cataleños! 

Hoy os traigo un tema que sea cual sea nuestra edad nos va a resultar interesante, ya sea porque estamos cursando unos estudios ahora mismo o porque por ejemplo, estás leyendo esto y tienes hijos, sobrinos, etc que los cursan. 

El tema que he escogido es el sistema educativo. Antes de nada veo importante dar algunos datos, como por ejemplo que en España, si tenemos en cuenta a los jóvenes de entre 18 y 24 años, el 18'98% de estos ha dejado de estudiar una vez ha cursado la ESO, siendo más habitual esta situación en los chicos que en las chicas. Es decir, la mayoría deja los estudios con 16 años, edad con la que se supone que ya eres apto para trabajar y por tanto es legal hacerlo.Esto nos sitúa en el segundo puesto con respecto a los países con una mayor tasa de abandono escolar de toda la UE, siendo superados solo por Malta. ¿Algo estaremos haciendo mal, no?

Según un estudio existen varios factores que han influido en el mal funcionamiento de este sistema. 

En lo referente a la infancia, se establece que existe una separación temprana del niño de sus figuras de apego, además de gran cantidad de fichas y normas que hacen que se limite la actividad natural de juego de este.

Con respecto a la primaria, la mayoría de centros se centra en mandar deberes y crear exámenes que más tarde se harán habiendo usado el alumno un método de memorización que pasados unos días no le servirá para nada porque ha memorizado la teoría, pero no ha aprendido nada. Además se dejan a un lado la creatividad y la curiosidad, a la vez que se recurre al castigo, hecho que provocará un descenso aún mayor en las ganas de aprender que el alumnado tenga en ese momento. 

Si nos centramos en la secundaria, los alumnos ya están cansados de siempre lo mismo, un sistema educativo estructurado en la obligación de memorizar, de obtener unos conocimientos limitados, sin dar pie a profundizar. 

A mi parecer, la culpa de esto la tiene el sistema educativo al completo, pero dentro de este se encuentran también los docentes, por tanto debo hablar de ellos. 

A la hora de impartir una clase, uno de los factores que influirán de manera decisiva en los resultados que se obtengan a final de curso es el docente que imparta la clase, por supuesto conjunto con las ganas y el esfuerzo que dedique el alumno a la asignatura. 

En primer lugar, si llegas a una clase y el profesor se sienta en la silla y empieza a leer la teoría, sin explicar, simplemente te dice que subrayes, que copies, lo que mejor te parezca; entonces desde la primera clase te parece que la asignatura es un aburrimiento, que no te aporta nada, no te dan ganas de aprender. Y como este muchos ejemplos. Podemos destacar también aquellos docentes que no tienen interés en su propia asignatura y ni si quiera se molestan en impartirla, sino que simplemente se sientan, charlan un rato contigo y se van. Vamos, que te tomas esa hora como una hora libre. Y destaco estos dos casos porque los he vivido yo personalmente. 

Creo que algo tan importante como el futuro de nuestro país, de sus ciudadanos, debería tener mucha más importancia de la que se le da. Por ejemplo en los colegios principalmente, los profesores tendrían que motivar mucho más a los alumnos a la hora de ser creativos, de querer obtener más información de las cosas, de no conformarse con lo que les da. Tenemos que promover gente curiosa, capaz de pensar por sí misma y a la vez aceptar lo que los demás piensan. Gente que no solo este especializada en un ámbito, que claro que también es necesaria, sino que tenga cultura general, que sepa debatir cualquier tema con unos fundamentos lógicos y razonados. 

Por eso pienso que se está infravalorando mucho el tema educativo, aunque parece que se está empezando a tener algo más en cuenta y nos estamos dando cuenta de que esto no funciona así. Algo hay que hacer y cuanto antes mejor, por que no podemos dejar que sigan creciendo generaciones estructuradas, sin capacidad de crítica.