Como cada semana, tengo que volver a hacer un rol y esta vez repetimos el rol de crítica, que como ya sabéis consiste en hacer una crítica sobre un tema determinado.
Esta semana me gustaría dirigir mi rol a la homofobia, puesto que creo que es uno de los temas más importantes que puedo criticar a día de hoy.
En primer lugar, ¿qué es la homofobia? Bien, podemos considerarla como la aversión obsesiva contra hombres o mujeres homosexuales, aunque también podemos incluir a aquellas personas con diversidad sexual como son los bisexuales, transexuales, transgéneros, los metrosexuales, e incluso aquellos hombres o mujeres que tienen gestos del sexo opuesto a pesar de ser heterosexuales. En otras palabras, la discriminación de toda persona que se sienta atraída por su mismo sexo o acate rasgos determinados del sexo contrario.
Una vez explicado el término, empecemos con la crítica porque voy para rato.
Lo primero que quiero decir es que a día de hoy, en pleno siglo XXI, me parece vergonzoso y repugnante que todavía haya personas que se sientan superiores que quienes se sienten atraídos por personas de su mismo sexo. ¿Cómo es posible que después de todo lo que han batallado y siguen batallando, aún no se haya conseguido que todo el mundo sea consciente de que cada persona con su cuerpo hace lo que quiere? Seguramente aquellos que discriminan después pidan libertad, democracia, pero, ¿dónde queda la libertad de expresión de los homosexuales? Es decir, tú puedes ir caminando por la calle con tu pareja e ir agarrados de la mano, pero si eso lo hace una pareja de hombres o una de mujeres, ya está mal visto. ¿Por qué? No lo sé ni lo entenderé nunca.
En la noticia que os voy a dejar a continuación aparece un claro ejemplo de homofobia. Después de verla espero que si alguien está leyendo esto y tiene ideales iguales o similares al agresor, cambie totalmente de opinión, porque cambiar un poco no vale.
Aquí tenemos la foto de un joven agredido en el metro de Barcelona por 4 inhumanos.
Esta foto muestra una pequeñísima parte de todas las cosas que pueden llegar a hacerles, puesto que el joven ha tenido "suerte" y no ha llegado a más. La noticia os la dejo aquí por si os interesa.
El caso de este joven es uno entre miles que se dan, podéis buscar en Internet y estoy segura de que os saldrán muchísimos más. Por que no se considera agresión solo cuando hay violencia, sino también cuando les insultas, cuando miras mal si se dan un beso, cuando pones cara de asco.
Además si vemos este titular, parece que la cosa no prospera, que muchos siguen anclados en el pasado, aunque si de verdad tuvieran un mínimo de idea, sabrían que hace años claro que también había personas homosexuales, solo que tenían que esconderse, y está claro que es lo último que deberían hacer.
Ahora bien, a las personas homófobas me gustaría saber qué harían en caso de que un familiar suyo tuviera esos gustos sexuales, en caso de que su hijo fuera homosexual. ¿Es más importante la orientación sexual de tu hijo que el propio hecho de ser de tu misma sangre? Que piensen por un momento cómo se habrán sentido también los padres, familiares, amigos de la persona agredida, porque también lo sufren. Hay que ponerse un poco más en la piel de los demás y dejar a un lado ideologías tan absurdas como esta.
Crezcamos un poco como sociedad.
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